Reseña: ‘Anora’, el cuento de Sean Baker que desmonta Hollywood
Título: Anora
Dirección: Sean Baker
País: Estados Unidos
Duración: 138 minutos
Fecha de estreno: 2024
Sinopsis: Anora, una joven prostituta de Brooklyn, tiene la oportunidad de vivir una historia a lo Cenicienta cuando conoce e impulsivamente se casa con el hijo de un oligarca ruso. Cuando la noticia llega a Rusia, su cuento de hadas se ve amenazado, ya que los padres parten hacia Nueva York para intentar conseguir la anulación del matrimonio.
Los cuentos no solo son una parte fundamental de nuestra cultura, sino que también se han convertido en una parte fundamental de nuestro día a día. Tanto es así que, sin ellos, la mayoría de sueños que rondan en nuestra cabeza no existirían. Las aventuras fantásticas de sus personajes o sus romances perfectos nos hacen ansiar una vida igual de idílica, un cuento igual de perfecto. Pero hay una realidad indiscutible que se cierne sobre todos estos deseos: los cuentos son solo cuentos. Y pocas personas han demostrado saberlo mejor que Sean Baker, quien nos presenta en Anora una de las historias más cautivadoras del año.
El nuevo largometraje del director sigue a Anora (Mikey Madison), una joven prostituta que trabaja como bailarina erótica en un club de Brooklyn. Allí conoce a Vanya (Mark Eydelshteyn), hijo de un importante oligarca ruso con quien rápidamente surge un gran vínculo emocional. Tal es la conexión que se crea entre ambos que, con mucho dinero de por medio, lo que iba a ser solo una noche se convierte en una semana llena de fiesta, alcohol y varios viajes. Para poner el broche de oro, Vanya propone a Ani casarse, pero la familia del ruso trata de impedir el matrimonio, lo que provoca que la euforia del comienzo vaya cayendo directa al vacío.
Hacía tiempo que no disfrutaba tantísimo yendo a ver una película, pero lo cierto es que Anora ofrece una de las experiencias en cines más memorables de los últimos años. Ningún estreno de este 2024, al menos de aquellos que he tenido la oportunidad de ver hasta ahora, logra siquiera acercarse al nivel de disfrute que regala el filme de Sean Baker. El director combina a la perfección momentos de pasión con trifulcas desternillantes, mezclando géneros durante dos horas y veinte minutos en los que hay cabida para un excitante intercambio de vibras y emociones: desde la sensualidad y el erotismo hasta el furor de una excelente tragicomedia. Esto no significa que dichas sensaciones vayan cogiéndose el relevo de escena en escena, sino que se superponen siendo capaces de convivir de manera simultánea. Todo es divertido y muy triste a la vez.
La película es una crítica prodigiosa al mito hollywoodense, optando por contar la que sería la versión realista de Pretty Woman. No obstante, también supone una estupenda representación de las clases sociales, ya que enseña cómo los caprichos de los ricos siempre tienen graves consecuencias para quienes no están en ese mismo estatus. Baker, además, retrata la facilidad con que la mujer es vista por los hombres como un objeto sexual, a menudo causando que las mujeres también sean víctimas del sistema patriarcal y lleguen a normalizar, o incluso a compartir, esa misma visión. La fascinante actuación de Mikey Madison consigue representar el sufrimiento de todas estas mujeres, reflejando las secuelas que deja el sexo como única vía de ascenso social y culminando con una escena final para la posteridad. Asimismo, el resto del reparto es igual de exquisito, destacando un adorable Yuriy Borisov.
Habrá muchas personas que, tras haber visto Anora, piensen que no es una película perfecta. Y lo más probable es que estén en lo cierto. El filme no inventa la rueda y su trama no parece tener los ingredientes que conforman la receta de una obra maestra —¿alguien sabe acaso cuáles son esos ingredientes?—. Sin embargo, absolutamente nada me molestó mientras veía la película: ni su larga duración ni ninguna de sus escenas. De hecho, no solo es que nada me molestara, es que todo me cautivó, haciéndome pasar un rato extraordinario en la sala de cine. La historia nos presenta una vida de ensueño que desborda la pantalla, una vida de película que Sean Baker estruja y retuerce hasta crear algo tan dramático como sumamente maravilloso.
¡Ahora puedes recibir todas las entradas por correo electrónico!
No hay comentarios: